Pues la respuesta es, Que No Se. Nadie lo sabe; la vida a nivel individual o colectivo puede cambiar en un segundo, lo que si se es que Jesús nos ha enseñado a vivir cada día y que cada día trae su propio afán y El siempre tiene el control.
Empezar un nuevo año, de alguna manera se asimila a una nueva aventura hacia lo desconocido y los seres humanos siempre tenemos ese temor.
Pero como hijos de Dios, tenemos el conocimiento y las herramientas para hacer de este nuevo año, un año de bendición y crecimiento. Imaginemos los sentimientos y temor hacia lo desconocido que pudo experimentar Abrahán cuando Dios lo llama a una tierra desconocida, donde el tendría que volver a empezar, plantar y cosechar y tal vez a el mismo no se le hubiera ocurrido nunca, no fue una idea que se produjo en su cabeza, fue lo que Jehová le dijo que hiciera y como recompensa, le hizo promesa y el obedeció: Que le daría un hijo (a pesar de que Saray era estéril) y que haría de el una gran nación y que en el serian benditas todas las familias de la tierra. ¡Que gran promesa! Pero una promesa requiere de varios pasos:
- CREERLA
- OBEDECER
- EJECUTARLA es decir, desarrollarla, crecer y resolver todos los obstáculos que se presenten, físicas, de territorio, externas, pruebas, de carácter, etc.
Dios a nosotros nos ha dado grandes promesas, pero para alcanzarlas debemos cumplir con esos tres pasos anteriores; y esto significa que si Dios nos promete Pan, no necesariamente esperamos Pan ya horneado y tajado; tampoco que nos sentaremos a esperar que alguien toque a nuestra puerta con el pan (aunque en muchos casos así ha sido); pues no sabemos como Dios traerá la bendición, a lo mejor alguien nos provee la harina, otro el huevo y la sal y otro que sabe como juntar esos ingredientes, nos enseña a hacer el Pan, nos nutrimos y alimentamos a nuestra familia y después pensamos en colocar una panadería…
Dios siempre tiene un propósito: Mis planes para fin de año cambiaron súbitamente cuando me torcí un tobillo, estos acontecimientos y el cambio de rumbo de mis planes en un segundo me hicieron reflexionar en que verdaderamente no tenemos control sobre nuestros días, nuestros planes y deseos, sino que es Dios quien verdaderamente tiene el control de los hilos invisibles de nuestro destino, las circunstancias, los hechos y todos los acontecimientos que rodean nuestra vida.
Estamos iniciando un nuevo año y nos sentimos llenos de una energía muy especial que nos hace querer renovarnos, superarnos, crecer y aventurarnos en propósitos más altos para nuestra vida y todo lo podemos lograr, si incluimos a Dios en nuestros planes, si pedimos a nuestro Padre en el precioso Nombre de Jesús y si sujetamos nuestra vida al que todo lo puede.
Nosotros, los hijos de Dios tenemos herramientas más valiosas que el oro puro y mas poderosas que cualquier arma inventada por el hombre y todo este poder se encuentra en El Espíritu, en el hombre nuevo, así que nuestro primer deseo para este año nuevo, debe ser CRECER y FORTALECERSE en el Espíritu y todo lo demás que deseemos lo vamos a recibir por añadidura. A continuación veremos algunas de estas herramientas:
1°. La Fe.
Sabemos que la fe viene por el oír y el oír La Palabra De Dios, por lo cual te invito a leer diariamente La Biblia, hacer tu devocional y asistir regularmente a la Iglesia; la Palabra de Dios dice que pidamos y se nos dará, busquemos y hallaremos, que toquemos y se nos abrirá. (Mt.7.7), pero seria inútil pedir o tocar puertas, si lo haces sin fe y esa fe debe estar fundamentada en Dios; Padre, Hijo y Espíritu Santo, porque solo El, puede hacer realidad nuestros sueños, bendecirnos, proveernos y guardarnos. La Palabra nos enseña a pedir con fe, con plena certidumbre de que tendremos lo que pidamos, porque somos Sus hijos y Dios nos ama de tal manera que no podemos comprender la magnitud de su amor.
2° Confianza y Seguridad.
Jesús dijo que estaría con nosotros todos los días de nuestra vida y no importan las circunstancias, El está y estará siempre ahí, sustentándonos con Su amor y Su poder. El siempre tiene el control sobre nuestra vida, nuestra familia y las circunstancias de nuestra vida y Su paz que nos cubre las 24 horas del día/365 días al año/ se alimenta y se nutre de la confianza que tengamos en El y de la seguridad (no duda) de nuestra Salvación y relación permanente con El, aun cuando suceden cosas que no están en nuestros planes, El las permite con un propósito, por algo suceden y no son acontecimientos al azar, porque El Sí tiene el control. Cuando algo imprevisto suceda, es porque Dios nos esta librando de algún peligro mayor o de algo mas grave y por lo general, agradezco a Dios por haberme librado de algo peor y aun porque el inconveniente pudo haber sido mas grave.
3°. El Amor.
El amor es mucho mas que un sentimiento que nos hace sentir felices, protegidos y amados; el amor es una fuerza universal, un poder tan fuerte que no esta sujeto a las leyes de la física ni del tiempo; puede conectarse con Dios y con otros y es en esa relación con nuestros semejantes que podemos dejar huella, el amor con que nos relacionamos con el prójimo y con que realizamos nuestras tareas, son la impronta que nos identifica, es el sabor que dejamos en cada persona, es el único bien que trasciende mas allá de la muerte; es el vinculo perfecto, es el poder que sana, que restaura, que se transmite, se comunica, se difunde, se impregna, que puede tocar sin manos, caminar sin pies, viajar sin barreras de distancias, color o raza; es la fuente de inspiración de Dios y los mortales y el motor de la vida, la tierra y sus habitantes. Si amamos a Dios en primer lugar y a nuestro prójimo como a nosotros mismos, estaremos cumpliendo con el mayor de los mandamientos que Jesús nos dejó.
4°. La Oración.
Es comunicación con Dios: Nosotros somos los emisores (De donde sale el mensaje), el canal que transporta nuestras palabras y pensamientos, (Es nuestro corazón) y Dios, quien escucha nuestras oraciones (El Receptor) a donde llega el mensaje. Y puedes orar a cualquier ora, en la comodidad de tu hogar o en tu trabajo, en el transporte o durante una actividad cualquiera ¿No es maravilloso? Ni El Internet, ni las redes 4G (que son las mas veloces actualmente), ni los celulares, radios, micrófonos, ni ningún medio de comunicación moderno, es tan perfecto, instantáneo, preciso, claro, neto, sin interferencias o malas interpretaciones, como lo es esta maravillosa herramienta que Dios ha provisto para comunicarse con sus hijos, escucharlos, tener siempre la línea abierta, disponible, sin importar el clima, los satélites, etc. Tenemos esta maravillosa herramienta, úsenosla, todos los días, hablemos con Dios, comuniquémonos, hablemos con franqueza lo que nos pasa, lo que esperamos, lo que queremos, a lo que tememos, etc. Y no nos olvidemos de orar por otros, por nuestros países, por nuestra tierra y por la Iglesia de Cristo.
5°. La Obediencia.
Cuando aceptamos a Cristo en nuestra vida o le abrimos la puerta de nuestro corazón, lo hicimos libre y voluntariamente, le dijimos implícitamente: “Toma el control de mi vida” y esto implica que le estamos dando autoridad sobre nuestro cuerpo y mente, nuestra familia y nuestros bienes y lo aceptamos como El Señor, suficiente Salvador y Rey en nuestra vida, quien gobierna y a quien decidimos un día entregar nuestro ser (nuestros pensamientos, sentimientos y nuestra voluntad). Seria lógico que después que le hemos entregado todo a alguien, en sus manos para que lo administre y lo gobierne, ¿no atendamos y sigamos sus instrucciones? O que ¿no obedezcamos su Palabra? O Que ¿no cumplamos con sus mandamientos? O que ¿no lo tomemos en serio y no sintamos respeto, admiración, amor y agradecimiento, después de saber lo que El hizo por nosotros? Se que es una palabra dura y pido perdón, si alguien se ofende, pero ¿de que otra manera puedo explicar la obediencia?
Dios sabe que no es fácil, pero también conoce nuestro corazón, capacidad y limites y no te pedirá lo que no seas capaz de dar, ni te enviara ninguna prueba que no seas capaz de pasar.
Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en donde quiera que vayas. (Josué 1:9)
Autor: Hefzi-ba Palomino
Fuente: www.jovenes-cristianos.com